sábado, 10 de enero de 2009

INTRODUCCIÓN

La primera carta a los Tesalonicenses (1 Ts.) es la más antigua que se ha conservado de Pablo y, al mismo tiempo, es probablemente el escrito más antiguo del Nuevo Testamento.

La ciudad de Tesalónica, situada en la parte norte de la actual Grecia, era la capital de la provincia de Macedonia.